Creada en 1974, EMI-Manresa es una fundación para la formación integral de profesionales del sector servicios tanto en situación de desempleo como ‘trabajadores activos’ que buscan formarse en puestos de responsabilidad específica. Anna Martínez, su directora general, nos cuenta que hace tres años se puso en contacto con diversas empresas del sector crucerístico para sondear posibles colaboraciones: “De inmediato nos hablaron de la necesidad de contratar personal cualificado para posiciones relacionadas con la hostelería y, sobre todo, nos hicieron saber que existía una demanda importante de trabajadores locales, especialmente en Barcelona”.
Para muestra de estas necesidades, un botón; el crucero más grande del mundo, el espectacular Symphony of the Seas (Royal Caribbean), puede llegar a ocupar a más de 2.000 miembros de tripulación. Un ejército colosal de profesionales formado por innumerables perfiles y especialidades diferentes, desde el propio capitán hasta el asistente de camarote, pasando por los servicios médicos, los oficiales de seguridad, marineros y cadetes o el personal de hostelería. La lista es muy larga. Y es que estos navíos precisan de personal cualificado especialmente en su puerto base, Barcelona, donde se genera una demanda de servicios muy elevada.
El espectacular Symphony of the Seas (Royal Caribbean), puede llegar a ocupar a más de 2.000 miembros de tripulación
Poco tardó la Fundación en ponerse manos a la obra y crear los cursos de camarero de sala (220 horas) y de camarero de bar (250 horas), que van por su tercera edición y están totalmente subvencionados por los servicios de empleo de Catalunya. El programa incluye formación práctica de restauración en el entorno de los buques de pasaje, capacitación técnica en seguridad marítima, clases de inglés profesional y módulos dirigidos a la sensibilización medioambiental, la igualdad de género y la inserción laboral. “El hecho de ofrecer personal tan preparado ha sido muy bien recibido por las navieras”, asegura Anna Martínez. Una gran oportunidad para trabajadores de la hostelería que llega de la mano de una industria que exige altos niveles de profesionalidad y que ofrece un amplio abanico de posibilidades.
¿Qué se exige para obtener una plaza en estos cursos? “Estar en situación de desempleo y tener un nivel de formación reglada (ESO). Según el puesto de trabajo al que se aspire en el proceso selectivo se tienen en cuenta tanto la experiencia en hostelería como el nivel de idiomas”, explica Martínez. De hecho, en EMI-Manresa se trabaja exhaustivamente la adaptación de personas ya formadas en restauración para que puedan acceder directamente a un puesto de trabajo en un crucero.
El hecho de ofrecer personal tan preparado ha sido muy bien recibido por las navieras”
Los cursos se componen de un máximo de quince alumnos, y el porcentaje de colocación del programa asciende al 60% en diferentes navieras. “EMI-Manresa tiene firmado un convenio de colaboración con compañías de cruceros tan sólidas como la suiza Viking Cruises, entre otras, para la inserción inmediata de nuestros alumnos”, afirma Anna. Pero la labor de la fundación es muy proactiva y, por supuesto, no se detiene aquí y va más allá, como quiere dejar claro la directora: “Además, de la relación de EMI con las navieras han surgido otras necesidades por cubrir a bordo: en el ámbito del entretenimiento (Youth Staff y Cruise Staff) y en la atención directa al cliente (Front Desk Hotel)”. “Estamos muy satisfechos. Los alumnos han alcanzado un sueño: afianzar su carrera en un sector con perspectivas profesionales muy interesantes”, añade Anna.
Gracias a este curso y a la demanda procedente de esta industria he podido obtener un trabajo seductor y comenzar una vida nueva con un horizonte muy prometedor”
Arnau Montañés, ex alumno de la promoción de Servicio de Bar y Cafetería de 2017, suscribe las palabras de la directora de EMI-Manresa. Se ha embarcado en lo que él considera “una aventura apasionante con largo recorrido profesional. Gracias a este curso y a la demanda procedente de esta industria he podido obtener un trabajo seductor y comenzar una vida nueva con un horizonte muy prometedor”, atestigua el joven.
En definitiva, el hecho de que Barcelona se haya consolidado como ‘puerto base’ y primer puerto en el Mediterráneo ha supuesto un cambio muy significativo en la necesidad de contratación de las navieras. “No cabe ninguna duda; el dinamismo del sector en la Ciudad Condal ha impactado muy directamente en el mercado laboral con un alto incremento de este tipo de ofertas de trabajo”, remata Martínez.